¿Te has parado a pensar…?

Si partimos de la base que todo está conectado y que todo guarda relación unas cosas con otras, nos daremos cuenta que si recibes muchos post y noticias o comentarios sobre liderazgo a tu alrededor podría ser una invitación a que te mires y te preguntes si realmente estás liderando tu vida o te estás dejando llevar por la corriente de lo que se llama un normal comportamiento.

Tu malestar, la falta de liderazgo de tu jefe, la cantidad de post que se publican acerca de cómo debería ser el líder ideal…¿no crees que puede ser una invitación a que te preguntes si realmente estás liderando tu vida? Yo me lo pregunto.

Y justo ese papel de líder que tan lejano parecía a mí resulta que es la clave para poder emprender una labor a la que estoy llamado a realizar.

Me he preguntado esto y te lo comparto.

Ser líder no es algo lejano que deben de hacer «otros». Ser líder empieza por uno mismo. Empieza por el reconocimiento de la capacidad propia para realizar aquello que debemos realizar. Aquello a lo que estamos llamados a ser. Aquello a lo que estamos llamados a compartir.

¿No es bonito concebir así el liderazgo?